La jornada transcurrió con normalidad (si por normal podemos entender que los vecinos tengamos que salir a hacer el trabajo de los servicios del ayuntamiento) hasta que uno de los grupos en que nos habíamos dividido encontró algo bastante desagradable. A la orilla del río, junto a unos cables, había una rata muerta de considerable tamaño y unos restos de lo que parecía sangre y trozos de carne. Mientras hacíamos fotos de los restos, intentando no tocar nada por miedo a coger alguna enfermedad vimos otra rata en el río, siendo arrastrada por la corriente. A continuación dejamos algunas de las fotos que tomamos.
Esa noche uno de los vecinos le enseñó las fotos a un amigo biólogo, quien le recomendó que recogiésemos los restos (con las debidas precauciones) y se los diésemos para examinarlos y saber tanto las causas de la muerte (empezamos a tener miedo a infecciones) como de qué animal se trataba, porque tras ver las fotos no estaba seguro de que fuese una rata. Desgraciadamente, al llegar los restos habían desaparecido. No creemos que la rata se marchase por sí sola. Alguien la hizo desaparecer interesadamente. Dado que la concejalía sabía que íbamos a hacer una batida de limpieza y que desde el primer momento una patrulla estaba vigilando desde el puente, llegando a pedir la documentación a dos chicos jóvenes que se unieron a nosotros para limpiar, creemos que detrás de ello está la concejalía o el ayuntamiento, que no quieren que nada de esto se sepa y que se empeñan en ocultar lo que está a la vista de todo el mundo. Desde aquí les acusamos de degradar las condciones de vida del barrio y de ocultar después las evidencias, tratando de tapar lo que es un auténtico escándalo.
Pero nosotros nos resignamos ¡Queremos un barrio digno!
¡Desinfección y desratización de los espacios públicos ya!
¡Metro de Pirámides: zona libre de ratas y otros animales!
¡Vecino, movilízate!
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